El 16 de junio de 2017, Cristobal Cornejo descansaba después de un día de trabajo, y decidió salir de su apartamento a fumar un cigarrillo. Sin advertencia alguna, recibió disparos de ambos lados. A pesar de las seis heridas de bala, pudo volver al apartamento y pedirle a su hijo que llamara al 911.
Cuando llegó en ambulancia a Ben Taub Hospital, Cristobal estaba inconsciente. Los médicos comenzaron a evaluar y reparar de inmediato el daño en los pulmones, el colon, el hígado, el riñón y los huesos. En los próximos sietes meses, debió someterse a 22 cirugías y tres hospitalizaciones. Algunas de las cirugías eran tan cercanas entre sí que los médicos no cerraban el quirófano, sino que dejaban una solapa protectora mientras una terapia de cierre asistido por vacío en la herida mantenía la cavidad abdominal limpia y drenada. Finalmente, los cirujanos tomaron músculos de la pierna para hacer reconstrucciones, y Cristobal debió usar una bolsa de colostomía durante un tiempo.
Si bien Cristobal aún no está lo suficientemente fuerte como para volver a trabajar en la construcción, les cree a los médicos cuando le dicen que él es un milagro. Él celebra una recuperación asombrosa.
Cuando Cristobal elogia a Harris Health, se refiere a todo el sistema: su médico de atención primaria en Vallbona Health Center, los cirujanos, todo el personal de Ben Taub, los fisioterapeutas de Quentin Mease Hospital y la psicóloga que lo ayuda a lidiar con el trauma emocional provocado por los disparos.
La gratitud de Cristobal es elocuente. "Dios fue el primero en cuidarme. Luego, Dios eligió a los médicos y al personal de enfermería para que se ocuparan de mí. Les agradezco a todos. Los médicos hacen todo lo posible para salvar vidas. Lo dan todo por sus pacientes".
Los hombres que le dispararon a Cristobal nunca fueron arrestados, pero él no guarda rencor. En lugar de eso, reza por ellos. Él y su familia se mudaron a un vecindario más seguro; y si bien el año pasado tuvieron dificultades financieras, Cristobal es optimista en cuanto al futuro. Continúa trabajando con los médicos para superar los obstáculos físicos y emocionales.
Cristobal les advierte a las personas que estén atentas a lo que sucede a su alrededor. Si alguien parece estar tramando algo turbio, probablemente lo esté haciendo. "Sean precavidos", dice.